Normalizar las violencias que se ejercen contra nosotras las mujeres, es justamente el flagelo al que nos enfrentamos no sólo las autoridades de cualquiera de los niveles de gobierno, también, la sociedad en su conjunto día a día.
Muchas acciones de política pública desde las instituciones públicas y privadas, así como desde las organizaciones civiles, se implementan para enfrentarlo, incluso instituciones educativas de todos los niveles tanto públicas o privadas, se han sumado a ello.
Por eso resulta inconcebible que una institución de estudios superiores la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), hubiese permitido realizar un evento, a favor de normalizar uno de los delitos que tiene efectos devastadores en las mujeres, en sus familias y en la sociedad en su conjunto el delito de violación.
Aun cuando de todos/as es sabido que es una universidad abiertamente católica y siempre se ha respetado ese origen, así también me parece, que esta Universidad debe tener respeto para todas aquellas mujeres que han sido víctimas de este delito, muchas de ellas de su propia institución. Tan solo para recordar de qué hablamos, recordemos que es la Violación:
“Al que por medio de la violencia física o moral tuviere cópula con una persona sea cual sea su sexo, se le aplicarán (…). Se entiende por cópula, la introducción del pene en el cuerpo humano por vía vaginal, anal o bucal”. Las penas oscilan entre ocho y treinta años de prisión. (Artículo 267 Código Penal de Puebla)
Si producto de este terrible flagelo la mujer resulta embarazada, y decide interrumpir su embarazo, la ley se lo permite ya que en este caso -como en otros también permitido- es causa de excluyente de responsabilidad penal. Reitero si la mujer lo decide. La decisión es de las mujeres, de ahí la importancia de impulsar el derecho humano a decidir que tenemos las mujeres, no sólo cuando toca a nuestros cuerpos, sino en todo aquello que incida en nosotras.
Como vemos todo está debidamente normado. Por ello es inaceptable que una institución pública permita que se normalice este delito devastador con los mensajes que vimos “Madre por una violación, amo a mi hijo”, “Concebida en una violación, amo mi vida”, “Concebido en violación, amo mi vida” y “Mis amigas fueron concebidas en violación, amo sus vidas” que resultan patéticos.
Hacerlo también sin considerar el contexto de una peligrosa irritación y una alta polarización por el que estamos transitando en nuestro país y en nuestro estado de Puebla, es absolutamente irresponsable, por si no se han dado cuenta bastantes amenazas ya pululan por el país.
Sin embargo este hecho visibiliza una vez más a aquellos que consideran que su pensamiento debe ser el único. Dice Claudio Flores Thomas “seguros de que no sólo tienen autoridad moral, sino exclusividad moral”
¿Así queremos en Puebla erradicar las violencias contra las mujeres?
@rgolmedo
Palabra de Mujer Atlixco
rociogarciaoolmedo.com
Comments